Ésta vivienda unifamiliar se ubica en la parte más alta del barrio Los Azhares ganando las mejores visuales hacia la ciudad y el cerro San Javier. El emplazamiento en el terreno se decidió en base al estudio de las orientaciones para obtener la mayor cantidad de luz natural durante todo el día y a la vez disminuir el consumo energético de la casa.
La característica distintiva de la casa son los techos a dos aguas que dan la sensación “de volar” y se despegan de las mamposterías asemejándose a dos alas. Es destacable también la resolución de la cubierta del garaje con los apoyos desmaterializados.
Exteriormente se utilizaron materiales nobles como el ladrillo visto, el hormigón y el revoque blanco que definen una estética moderna y despojada a la casa.
Los cielorrasos en Living, Estar y Galería están hechos de madera de eucalipto aportándole calidez al espacio.
También se incorporó el uso de tecnología, característica distintiva del estudio, en el uso de cerradura digital en el acceso y toda la iluminación con LEDs