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Casa Arbol, A + R A + R Casas modernas: Ideas, imágenes y decoración
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Casa Arbol, A + R A + R Casas modernas: Ideas, imágenes y decoración

CASA ARBOL

“La vida siempre me pareció más importante que la arquitectura”.  Esta frase de Oscar Niemeyer queda plasmada en un edificio sustentable, que cobra vida como parte del paisaje. Implantada en el delta en la provincia de Buenos Aires, la “Casa Arbol”, se erige como un elemento más de su entorno. La idea principal del proyecto consiste en la elevación del programa en una planta que se despega del terreno, para aprovechar al máximo las visuales hacia el río, y preservar el terreno que contiene al edificio, a través de esta planta baja libre. Los clientes requerían de un espacio donde distenderse los fines de semana, y en el cual se pudiera disfrutar de la naturaleza sin alterarla dentro de las posibilidades que ofrece la arquitectura sustentable. La familia, compuesta por adultos y niños, buscaba una planta simple, con ambientes integrados, donde se pudiera disfrutar del entorno y de las visuales como cobijo elemental  abierto a la naturaleza y en armonía con ella.

 Inspirada en la arquitectura del delta de Buenos Aires y en el concepto de Frank Lloyd Wright que afirma “La tendencia natural de cada cosa mal concebida es separarse y diferenciarse rotundamente en medio de la naturaleza perfectamente quieta”, y en los 5 puntos de Le Corbusier, el proyecto se desarrolla a partir de un volumen que aloja usos públicos y un volumen que toma la dirección del límite lateral del lote, el en el cual se ubica la función privada de la vivienda. El desarrollo de la idea no altero los conceptos principales que le dieron origen a la idea de partido.

El proyecto fue aprobado por el cliente, ya que respetaba en todo momento las condiciones sustentables, provecho de recursos naturales, ahorro energético, así como también cumplía con sus necesidades individuales.

La arquitectura del Tigre que se ubica en el delta de Buenos Aires tiene un estilo particular. Por lo general se trata de viviendas sostenidas por pilotes, en donde la madera cumple un rol fundamental. Los barrios cerrados suelen olvidarse del contexto donde se implantan y responden usualmente a los deseos arbitrarios de cada propietario, sin embargo, nos pareció imperioso respetar la identidad de dicha área geográfica.

La planta se desarrolla ubicando los usos públicos en el volumen sobre la calle, y los usos privados hacia el lateral.  La circulación se organiza a partir de un doble acceso: La entrada principal, tratada como una caja de vidrio que cose la planta libre con el volumen de usos públicos, y la rampa que recorre la casa en su perímetro, generando diversas situaciones en su desarrollo, la cual remata en la galería del contrafrente.

El hormigón visto es protagonista tanto en el interior como en el exterior de la vivienda. Para aprovechar las visuales se utilizaron grandes ventanales de vidrio. Son Carpinterías de aluminio con doble vidriado hermético para preservar la temperatura interior. Para controlar la privacidad en el frente se diseñaron parasoles materializados con una estructura de chapa oxidada reciclada, con una morfología que apela a las ramas de un árbol. Los pilotis son de troncos de árbol, permitiendo visuales desde la calle hacia el río aportando una estética natural en armonía con el entorno. El acceso es una caja de vidrio conteniendo la escalera principal, mientras que la rampa, como acceso alternativo, es de hormigón, acentuando el recorrido alrededor de la casa.

La utilización de carpinterías de aluminio alta prestación con doble vidriado hermético, permite que la diferencia climática entre el interior y el exterior sea absorbida por el puente térmico. La ventilación cruzada que se genera a partir de la disposición de los ventanales, evita el excesivo consumo de energía, renovando el aire de los ambientes. Al ser ambientes con amplias superficies vidriadas, se necesita menos iluminación artificial. Los dormitorios cuentan con ventiluces perimetrales,  preservando la intimidad del uso y permitiendo el ingreso de luz solar en invierno y ventilación cruzada en verano. La estructura de la vivienda sobre pilotines, y la decisión proyectual de elevarla por sobre el terreno natural, permite que se eviten inundaciones, y el empleo de bombas de achique. La terraza jardín, trabaja como superficie de absorción ante las lluvias.

Al realizar la estructura con troncos de árboles que se han talado para la venta de lotes en el barrio, se propone reutilizar un recurso natural para “revivirlo” darle su lugar nuevamente en el paisaje, transformando a la obra de arquitectura en un organismo vivo. Para los parasoles, se aprovecha el metal reciclado, sacado de demoliciones, aportando a la reducción de desechos.

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