En los dormitorios es importante tener tu propia personalidad, sobre todo si es una habitación pequeña, ya que es el lugar de la casa dónde probablemente pasas más tiempo y la única manera de sentirte bién es encontrando que los colores que más se apropien a ti. Para que ésta sea placentera, puedes utilizar colores cálidos e iluminar con luz amarilla, porque la blanca es muy fría y le da un ambiente menos acogedor.